Los guantes de trabajo, al igual que el resto de equipos de protección personal, se clasifican en tres categorías:

Categoría 1

Guantes que por su diseño sencillo, el usuario puede juzgar por si mismo su eficacia contra riesgos mínimos y cuyos efectos, cuando sean graduables, puedan ser percibidos a tiempo y sin peligro para el usuario: Agresiones mecánicas superficiales, productos de mantenimiento cuyos efectos sean fácilmente reversibles, choques y vibraciones que no afecten a las partes vitales.

Categoría 2

Guantes destinados a evitar riesgos de todo tipo que no pudieran llegar a causar lesiones muy graves (riesgos intermedios).

• Estos guantes han de superar, además de la EN388, la norma pactada que regule el riesgo frente al que se recomiende en ese guante.
• El marcado que han de llevar los guantes bajo categoría 2, es:

-Identificación del fabricante.

-Pictograma del riesgo frente al que se recomienda.

-Niveles de resistencia.

-Modelo o referencia.

-Talla.

-Pictograma relativo.

-Marcado CE.

• La conformidad con la norma ha de ser hecha por un laboratorio notificado por la CE, emitiendo un certificado CE (Comunidad europea).

Categoría 3

Guantes destinados a proteger al usuario de un peligro mortal o que pueda dañar gravemente y de forma irreversible la salud, sin que se pueda descubrir a tiempo su efecto inmediato. Estos guantes han de superar, además de la EN388, la norma pactada que regule el riesgo frente al que se recomiende en ese guante. El marcado que han de llevar los guantes bajo categoría 3, es:

• Identificación del fabricante.
• Pictograma del riesgo frente al que se recomienda.
• Niveles de resistencia.
• Modelo o referencia.
• Talla.
• Pictograma.
• Marcado CE más el número de identificación del Organismo de control notificado encargado del control de calidad CE en la fase de producción.